Se determinó que el grupo armado iba a dar un importante golpe hoy en la autopista a Ezeiza; hay 15 detenidos
Estaba todo listo. El jefe de la banda, desde su lugar de detención, ya había aprobado el plan criminal. El golpe se iba a concretar hoy en la autopista Riccheri y el blanco elegido era un camión que tenía que transportar una carga de notebooks para una importante cadena de comercios de venta de electrodomésticos. Pero los detectives judiciales y policiales se les anticiparon. Con la detención de 15 sospechosos lograron desarticular una peligrosa organización de piratas del asfalto a la que se le atribuyen varios de los más importantes golpes de los últimos diez meses; entre ellos, el asesinato de un policía federal retirado en Luján, Héctor Osvaldo Goncalvez Pereyra, baleado en septiembre pasado, días antes de que debiera declarar en la causa por la muerte del fiscal federal Alberto Nisman.

Así lo informaron a LA NACION calificadas fuentes judiciales. En los allanamientos, realizados por la policía bonaerense en La Matanza, Tigre, San Martín, Ezeiza y la ciudad de Buenos Aires, fueron secuestrados más de 1.500.000 de pesos, cinco pistolas calibre 9 mm., ametralladoras y un fusil automático liviano (FAL).
Esta organización sería la que el 10 de febrero pasado robó a los tiros un camión que llevaba una carga de consolas PlayStation4 y 200 joysticks Sony hacia un centro de distribución de la empresa Frávega. Ese hecho ocurrió en la Autopista Riccheri, a metros del predio de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) de Ezeiza. Es en la misma zona donde pensaban atacar hoy.
Las fuentes judiciales consultadas confirmaron que en cada golpe los delincuentes tenían el dato de la mercadería transportada y de parte de la ruta que habría de recorrer el camión elegido. «A partir de escuchas telefónicas se les pudo seguir el rastro a los sospechosos», dijo uno de los informantes.
Se trató de una investigación en conjunto entre los fiscales Pedro Illanes y de Diego Benedetto, de la Unidad Fiscal de Instrucción (UFI) N° 3 de Mercedes y de la Unidad Especializada en Piratería del Asfalto y Autopartes del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, respectivamente. Los allanamientos habían sido autorizados por el juzgado de Garantías N° 3 de Mercedes, a cargo de Pablo Morán.
Primeras pistas
Con la colaboración de detectives de la Patrulla Rural de la policía bonaerense, el fiscal Illanes comenzó a investigar a la organización criminal en junio pasado, después de un golpe de piratas del asfalto ocurrido en la ruta 6, a la altura de Marcos Paz. En esa oportunidad un grupo comando robó un camión que se dirigía al aeropuerto de Ezeiza con mercadería para el free shop. «Los delincuentes se llevaron una carga de bebidas alcohólicas y de perfumes importados por un valor de 10.000.000 de pesos. Todos los golpes que protagonizaron fueron violentos», explicó a LA NACION un detective del caso.
Su colega Benedetto estaba tras los pasos de la banda después del robo a la empresa Frávega.
El 8 de septiembre pasado, en el kilómetro 79 de la ruta 7, a la altura de Luján, la banda interceptó un camión que transportaba indumentaria de la marca Lacoste. Hubo un intenso tiroteo en el que dos policías federales retirados que trabajaban como custodios fueron gravemente heridos. A las pocas horas falleció uno de ellos, Goncalvez Pereyra.
«La banda realizaba la inteligencia previa. Sospechamos que empleados infieles de alguna de las empresas de la cadena de logística les «vendía» los datos», explicó una de las fuentes consultadas.